A pesar de las temperaturas superiores a lo normal que se han registrado en Canarias durante este año, excepto en febrero, hasta ahora no se ha experimentado ningún episodio de ola de calor en el archipiélago. Sin embargo, las condiciones que se anticipan para esta semana podrían cambiar esa situación, según lo indicado por Víctor Quintero, director del Centro Meteorológico de Tenerife de la Aemet (Agencia Estatal de Meteorología).
La previsiones han llevado a la Consejería de Sanidad a emitir una alerta por riesgo de altas temperaturas en 39 municipios de cinco islas, excluyendo a La Gomera y El Hierro.
"Durante el año, hemos experimentado varios episodios cálidos, no solo en verano, sino también en primavera, pero ninguno ha cumplido con los requisitos para ser considerado una ola de calor", comentó el meteorólogo.
Esta vez, el episodio cálido que se avecina a partir del miércoles, con temperaturas entre 34 a 36ºC en las islas más montañosas y en Fuerteventura, podría cumplir los criterios necesarios para ser categorizado como la primera ola de calor del año. Para ello, deberá superar umbrales de temperatura específicos, afectar a una extensión geográfica amplia que involucre a más de una isla y durar más de tres días. "Los eventos de este año hasta ahora no han satisfecho todos estos requisitos simultáneamente", resaltó Quintero.
La llegada de una masa de aire cálido desde África, acompañada de polvo sahariano, está pronosticada para causar una ola de calor intensa y prolongada en toda la Península.
Se espera un ligero aumento de las temperaturas en las islas el martes, similares a las del lunes, pero un cambio significativo se pronostica para el miércoles. "Las temperaturas se incrementarán rápidamente. El jueves veremos un aumento significativo y el viernes alcanzaremos temperaturas realmente elevadas. Estos valores se mantendrán elevados durante el fin de semana y comenzarán a descender tímidamente el lunes", explicó el meteorólogo. Se anticipa que no será hasta el próximo miércoles cuando las temperaturas vuelvan a niveles similares a los de los días previos.
Con el objetivo de prevenir impactos en la salud debido al calor extremo, la Consejería de Sanidad emitió alertas de riesgo en 39 municipios canarios. Estas alertas buscan prevenir y preparar a la población, centros de asistencia, urgencias y gobiernos locales ante esta situación.
En Gran Canaria, se emitió alerta roja por riesgo alto entre el 9 y 13 de agosto en varios municipios. En Lanzarote, también se han emitido alertas, con advertencias naranjas y rojas, dependiendo del municipio y las fechas. Las islas de Tenerife y La Palma también han sido afectadas por estas alertas en distintos niveles de riesgo.
Los umbrales de temperatura establecidos en 2023 son de 33 grados centígrados para la provincia de Las Palmas y 34 grados centígrados para la provincia de Santa Cruz de Tenerife. Estos niveles de riesgo se determinan en función de un algoritmo que considera la temperatura máxima pronosticada, el umbral establecido, la persistencia durante un mínimo de tres días y otros factores de riesgo.
