En una rápida respuesta a un contacto de incendio de rastrojos, los Bomberos de Gran Canaria del parque de Arinaga fueron activados para dirigirse al casco del pueblo de Santa Lucía. Los conatos de incendio se originaron en las inmediaciones de una ladera en la zona de la Iglesia de Santa Lucía pueblo, como resultado de los fuegos artificiales durante uno de los eventos de las fiestas del Labrador.
Se logró controlar los cuatro conatos de manera efectiva, y actualmente, se están llevando a cabo operaciones para su extinción total. Este incidente, que podría haber tenido consecuencias más graves, fue abordado gracias a la colaboración entre Protección Civil de Santa Lucía y los Bomberos del Consorcio de Gran Canaria del parque de Arinaga.
La presencia de la Policía Local en el lugar garantizó la coordinación eficiente entre los diferentes equipos de respuesta, contribuyendo así a la pronta contención de la situación.
Este episodio destaca la importancia de la rápida respuesta de los servicios de emergencia y la colaboración entre diferentes entidades para prevenir y controlar incidentes, especialmente durante celebraciones festivas que pueden dar lugar a situaciones de riesgo.
Es una pena que se atribuyan los éxitos de otros.
ResponderEliminarFueron un total de 8 conatos los que hubieron esa noche, 1 de ellos se autoextinguió al no existir vegetación en los alrededores, 6 de ellos fueron extinguidos por Protección Civil de Santa Lucía y solo 1, el más pequeño y cercano a la GC-65 fue controlado por el Consorcio de Emergencias, que llegaron casi una hora después de que se produjeran los conatos (normal por su lejanía).
Por mucho que les duela aceptarlo, los VOLUNTARIOS de Protección Civil fueron los que salvaron la noche, así que los agradecimiento a quienes los merecen.