Con un total de 26 carrozas y miles de participantes con sus disfrases, el desfile circense partió desde Las Ramblas de Arnao para recorrer cuatro kilómetros por el casco, marcando un hito en la historia del municipio.
A pesar de la animada atmósfera, el desfile se vio interrumpido por problemas inesperados en la calle de Ruiz, entre otros, donde algunas carrozas participantes se vieron enfrentadas a cables electricos trenzados que pusieron en riesgo la seguridad.
A pesar de que las inspecciones previas que incluyen gálibo máximo permitido tiene que preveer este tipo de problemas y lo que puede suponer, ya que, antes de la cabalgata se controla las medidas de seguridad de las carrozas, está claro, que puede escaparse algo.
