Con motivo de las festividades de San Juan y San Pedro que se celebran este mes de junio, y considerando las tradicionales hogueras que tienen lugar en la víspera del 23 de junio y del 28 de junio, el Consorcio de Emergencias y Bomberos de Gran Canaria ha publicado nuevamente una serie de medidas preventivas para la realización de las hogueras.
Una de las medidas principales es informar al ayuntamiento sobre la ubicación planificada de la hoguera, lo cual facilitará la intervención de los bomberos en caso de ser necesaria.
Además, se recomienda evitar que la hoguera obstaculice zonas de paso de personas o vehículos, así como evitar áreas cercanas a automóviles, árboles o viviendas. Es importante también mantener la hoguera alejada de tendidos eléctricos, mantener una distancia de seis metros por cada metro de altura del fuego y asegurarse de que la zona esté libre de materiales que puedan propagar el fuego.
Otras recomendaciones incluyen evitar el uso de materiales ligeros en la hoguera, vigilarla constantemente, asegurarse de que el fuego esté completamente extinguido antes de abandonar el lugar y recoger los residuos generados por la hoguera.
El Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife también ha emitido recomendaciones para la noche de San Juan. Se prohíbe realizar hogueras en vías públicas, parques, jardines, barrancos y playas. Asimismo, se hace hincapié en las normas establecidas por el Área de Gestión del Medio Natural y Seguridad del Cabildo de Tenerife, que prohíben las quemas en general ese día y establecen límites para el uso de fuegos recreativos en varios barrancos de la zona de Anaga debido a los riesgos de incendio que pueden representar.
En cuanto a las hogueras, es fundamental ubicarlas al menos a 20 metros de edificios, carreteras, tendidos eléctricos o telefónicos, así como de vehículos estacionados. Se recomienda mantener una distancia de aproximadamente 50 metros entre hogueras. En caso de estar cerca de instalaciones con riesgo de incendio, esta distancia debe duplicarse (por ejemplo, gasolineras, almacenes industriales o áreas de almacenamiento de papel, cartón o madera). La altura máxima permitida para la hoguera es de tres metros, con un diámetro máximo de cinco metros, para evitar que la llama supere los 12 metros de altura y cause daños a personas o propiedades cercanas.
Por razones de seguridad y medioambientales, se debe evitar el uso de materiales inflamables, explosivos, neumáticos, electrodomésticos u otros similares en las hogueras. Es importante realizar labores de limpieza alrededor de la hoguera para prevenir la propagación incontrolada del fuego en caso de cambios en la dirección del viento u otras circunstancias.
Se recomienda contar con suministro o almacenamiento de agua cerca de la hoguera para poder apagarla o controlarla en caso necesario, ya sea mediante mangueras, cubos o incluso extintores si están disponibles. Los responsables de las hogueras no deben abandonar la zona hasta garantizar su completa extinción.