La isla de Gran Canaria se encuentra de luto por el fallecimiento de Francisca Díaz Rodríguez, conocida por todos como Paca, la de Artenara, quien ha fallecido a los 97 años de edad este pasado domingo. Paca fue una figura clave en la Romería del Pino, una festividad religiosa en honor a la Virgen del Pino que se celebra cada septiembre en la ciudad de Teror.
Durante muchos años, Paca se convirtió en una presencia imprescindible en esta tradicional procesión, siempre luciendo su sombrero y fumando su cachimba. Para muchos, Paca era una verdadera embajadora de la villa mariana y de su fiesta más importante. Tanto así que el Ayuntamiento de Teror decidió nombrarla hija adoptiva de la localidad en reconocimiento a su dedicación y compromiso con la romería.
El fallecimiento de Paca ha dejado un gran vacío en la comunidad local y ha sido recibido con gran tristeza por todos aquellos que tuvieron la fortuna de conocerla. Sin embargo, su legado y su espíritu seguirán vivos en las memorias de quienes tuvieron el privilegio de compartir momentos con ella durante tantos años en la Romería del Pino.
