El intenso calor que asola Gran Canaria, con temperaturas que superan los 34 grados, ha generado gran inquietud entre las familias grancanarias, quienes exigen medidas extraordinarias y urgentes en los colegios para garantizar la seguridad de sus hijos ante las altas temperaturas. La falta de preparación de las instalaciones escolares para afrontar estas condiciones climáticas extremas ha provocado múltiples desmayos y lipotimias entre estudiantes y profesores, según fuentes de la comunidad educativa.
La semana pasada, seis centros educativos, cinco en el sur de la isla y uno en el norte, solicitaron a la Consejería de Educación la posibilidad de cambiar a clases en línea para evitar el intenso calor dentro de las aulas, una petición que fue denegada. A pesar de ello, la Consejería de Educación informó que el viceconsejero, la directora territorial y el inspector de zona han visitado los centros que hicieron la solicitud y están trabajando en la implementación de un protocolo para hacer frente a las altas temperaturas, aunque este proceso llevará varias semanas.
Ante esta situación, las familias afectadas han pedido una reunión urgente con diversas direcciones generales y servicios del Gobierno regional para coordinar soluciones temporales de emergencia. Algunas de las medidas solicitadas incluyen la derivación de personal sanitario del Servicio Canario de la Salud a los centros educativos mientras dure la ola de calor, aprovechar la declaración de emergencia energética y climática para agilizar los trámites burocráticos, aumentar los fondos para el suministro de agua, alquilar o adquirir carpas para proporcionar sombra en los patios y equipos de refrigeración, así como permitir que los estudiantes opten por prendas más frescas y transpirables en lugar del uniforme escolar.
Además, este episodio de calor coloca a Canarias en un riesgo muy alto de incendios forestales, ya que se esperan temperaturas superiores a los 34 grados en amplias áreas durante los próximos tres días, según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). Esta ola de calor, que ya es la décima registrada en octubre desde 1975, se prevé que persista hasta principios de la próxima semana. La Aemet ha mantenido el aviso amarillo por la calima y las altas temperaturas que afectan al archipiélago desde principios de mes, aunque se espera que la concentración de polvo en suspensión disminuya en las islas orientales al final del día.
Los riesgos asociados al calor y la calima estarán vigentes durante todo el día en la mayoría de las islas, con excepción de La Palma, donde concluirán a las 12:00 horas, y La Gomera y El Hierro, donde se mantendrán hasta las 20:00 horas. Se pronostica una visibilidad de 3,000 metros debido al polvo en suspensión. Las temperaturas máximas afectarán principalmente a las medianías y zonas bajas de Gran Canaria y Tenerife, mientras que en La Gomera y El Hierro se concentrarán en las vertientes oeste y sur.
La Aemet también ha resaltado que desde el 29 de septiembre hasta el 8 de octubre, todos los días han registrado récords de calor para sus respectivas fechas, una situación sin precedentes en España desde al menos los años 70 del siglo XX en episodios cálidos.