El barrio de Las Huesas ha dado inicio este viernes a las esperadas Fiestas del Carmen 2025 con un emotivo pregón que reunió a vecinos, visitantes y autoridades locales en la plaza principal. El acto comenzó a las 20:00 horas, marcando el arranque oficial de unas jornadas festivas cargadas de tradición, alegría y participación vecinal.
La encargada de dar el pregón fue doña Ana María Delgado, una vecina muy querida que llegó al barrio hace 35 años. Reconocida por su compromiso y dedicación al pueblo, la Asociación de Vecinos le brindó el honor de inaugurar las fiestas con su discurso, además de invitarla a firmar en el libro de honor como pregonera. Sus palabras, llenas de emoción y recuerdos, despertaron el cariño y los aplausos del público presente, entre los que se encontraban representantes tanto del gobierno como de la oposición del Ayuntamiento de Telde.
La jornada continuó con una animada verbena a cargo del Dúo Azahar, que puso a bailar a todos los asistentes.
El sábado, las celebraciones siguieron con una tradicional romería a las 19:00 horas, en la que participaron agrupaciones como La Parranda La Sal y la Asociación La Unión. Tres carretas cargadas de ofrendas recorrieron las calles del barrio hasta llegar a la iglesia, donde se realizó la entrega a la Virgen del Carmen.
Más tarde, a las 22:00 horas, la música volvió a ser protagonista con la verbena nocturna del grupo Buena Onda, que mantuvo el ambiente festivo hasta entrada la madrugada.
El domingo 13 de julio, las actividades se diversifican para todos los gustos y edades. Desde las 10:00 horas, los amantes del motor pudieden disfrutar de una exposición de coches clásicos. A las 11:00 horas, los más pequeños se divirtieran con castillos hinchables y, al mediodía, vecinos y visitantes compartiran un asadero popular en un ambiente de convivencia. La jornada concluye a las 19:00 horas con el espectáculo infantil del show de Zapito, pensado especialmente para el disfrute de los niños.
Las Fiestas del Carmen en Las Huesas han comenzado con fuerza, mostrando el espíritu comunitario y la devoción que caracterizan a este querido barrio de Telde.