El partido de fĂştbol entre la UD Las Palmas y el Oviedo fue un encuentro bastante disputado, aunque el resultado final no favoreciĂł a los locales. La UD Las Palmas tuvo otro tropiezo en casa, esta vez con un marcador de 0-1 a favor del Oviedo. Los largueros se convirtieron en el peor enemigo de los canarios, ya que en varias ocasiones estuvieron cerca de anotar pero no tuvieron suerte.
El Oviedo, por su parte, logrĂł llevarse los tres puntos del Gran Canaria gracias a un juego poco vistoso pero efectivo. A pesar de las numerosas bajas en el conjunto asturiano, los amarillos no fueron capaces de puntuar, lo que dejĂł un sabor amargo en la aficiĂłn local.
Desde el comienzo del partido, la UD Las Palmas mantuvo su filosofĂa de juego, con el balĂłn en su poder y tratando de elaborar jugadas de peligro con paciencia. Sin embargo, la alta lĂnea de presiĂłn del Oviedo dificultĂł las cosas para los locales, que tardaron en encontrar su primera ocasiĂłn de gol.
Fue en el minuto 21 cuando Enzo Loiodice filtrĂł un balĂłn exquisito a Sandro RamĂrez, quien disparĂł raso al centro de la porterĂa defendida por el meta Braat. El Oviedo se defendiĂł con uñas y dientes ante el fĂştbol de toque, pero poco profundo, de la UD. En el 27 de la primera, despuĂ©s de una jugada combinativa de los amarillos, el balĂłn cayĂł en los pies de Sergi Cardona, quien realizĂł un caño increĂble sobre su rival para luego disparar flojo a porterĂa.
A pesar de los intentos de la UD Las Palmas por abrir el marcador, el Oviedo tambiĂ©n tuvo sus oportunidades de gol. En el minuto 35, se vio una buena jugada en solitario de Marc Cardona, que tras marcharse de su adversario, la puso atrás para que algĂşn compañero la empujara. Sin embargo, nadie llegĂł a tiempo para anotar. Por su parte, la magia de Borja Sánchez en el centro del campo, metĂa el miedo en el cuerpo a la UD cada vez que tenĂa la bola.
En la segunda mitad, el entrenador de la UD Las Palmas, Pimienta, agitĂł el banquillo para darle más frescura y profundidad al juego de su equipo. Pero el Oviedo saliĂł con más mordiente y valentĂa en ataque, lo que dificultĂł las cosas para los locales. A pesar de los esfuerzos de la UD Las Palmas por anotar, el larguero se convirtiĂł en el peor enemigo de los canarios, evitando que al menos empataran el partido.
En los últimos minutos del partido, los locales intentaron buscar el empate con más corazón que cabeza, pero no fue suficiente para lograr el objetivo. La derrota dejó a la afición local con una sensación agridulce, ya que la UD Las Palmas dio una de cal y otra de arena en su juego. A pesar de todo, Jonathan Viera cumplió 250 partidos como amarillo, lo que fue una buena noticia para la afición local.