El presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, ha anunciado una serie de intervenciones inmediatas para aliviar la congestión en la GC-1, especialmente en el tramo entre La Mareta y Bocabarranco. Estas acciones forman parte de una estrategia más amplia que busca optimizar la movilidad en la isla.
Entre Las Terrazas y La Pardilla, en dirección sur, se redistribuirán los carriles para facilitar el flujo vehicular: dos carriles continuos a la izquierda y dos carriles a la derecha para accesos locales. Este ajuste se implementará en un mes.
Por otro lado, en dirección norte, el carril exclusivo para guaguas en la entrada a Las Terrazas pasará a ser un cuarto carril para vehículos particulares en un plazo de quince días. Además, se habilitará un acceso directo desde el vial costero de Telde hacia la autovía, con el fin de eliminar puntos de congestión y mejorar la circulación hacia Las Palmas de Gran Canaria.
Estas medidas se suman a otras iniciativas previstas, como la futura construcción de un carril bus-VAO, nuevas conexiones hacia Melenara y Bocabarranco, y modificaciones en horarios escolares y laborales para reducir el tráfico en horas punta. Asimismo, el Gobierno central evalúa soluciones para agilizar la retirada de vehículos tras accidentes, otro de los factores que contribuyen a los atascos en la GC-1.
La mesa de seguimiento del tráfico insular, integrada por representantes de distintas administraciones, volverá a reunirse el 9 de junio para continuar el análisis de medidas que permitan mejorar la movilidad en la isla. Morales ha destacado el esfuerzo conjunto de todas las instituciones involucradas para encontrar soluciones efectivas.