La UD Las Palmas se encuentra en una situación crítica tras una serie de resultados desastrosos, acumulando solo tres puntos en nueve partidos. La reciente derrota ante el Celta de Vigo, que jugó con dos jugadores menos, ha intensificado la presión sobre el entrenador Luis Carrión, quien llegó al club en junio y tiene contrato hasta 2026.
Noticia de La Provincia.
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Este domingo, la cúpula del club se reunió de urgencia para evaluar su continuidad, mientras los aficionados expresan su descontento. A pesar de que el presidente Miguel Ángel Ramírez había respaldado a Carrión, la humillante derrota ha puesto en duda su futuro.
La próxima semana, el equipo se enfrentará al Valencia en un partido crucial para la salvación, ya que se encuentra en la última posición de la tabla y necesita urgentemente mejorar su rendimiento. La situación es tensa, y la incertidumbre sobre el futuro del técnico se cierne sobre el club.